El cierre de fin de año en las empresas quizá es uno de los momentos de mayor responsabilidad y tensión para los trabajadores, especialmente, porque aumentan las reuniones, la presión por cumplir con los balances, la preocupación que origina la aplicación de las evaluaciones de desempeño, la entrega de actividades pendientes, la planificación de los objetivos para el próximo año y sumado a ello las responsabilidades y los compromisos personales. Todas estas situaciones sin duda, pueden agudizar el estrés y la ansiedad en los empleados, manifestándose en signos como agotamiento físico y mental y la disminución de su desempeño.
Aunque saber sobrellevar el estrés laboral está más relacionado con las capacidades personales, también las herramientas y las estrategias lideradas desde las organizaciones pueden ayudar a minimizar los riesgos de sufrir este tipo de tensión, especialmente, para la salud de los trabajadores.
A continuación, se presentan algunas recomendaciones que podrían ayudar para gestionar el estrés y evitar que los trabajadores experimenten consecuencias como aburrimiento, fatiga, incapacidad para conciliar el sueño, falta de concentración en el trabajo, dolores de cabeza, etc.
Planificación anticipada: definir tareas y objetivos de fin de año con antelación es buena formar de preparar a los empleados y de organizar las responsabilidades, sin que se esto signifique la acumulación de actividades. Además, les permitirá organizar su tiempo para mantener el equilibrio entre el trabajo y su vida personal.
Flexibilización de horarios laborales: al darles más control sobre su tiempo, los trabajadores se sentirán más motivados y trabajarán con mayor productividad. La flexibilidad de horarios ayudará a que el estrés disminuya considerablemente al permitirles que distribuyan de mejor manera su jornada laboral.
Desconexión laboral: desconectarse de las responsabilidades del trabajo les permitirá a los trabajadores recargarse de energía física y mentalmente. Por lo que es importante garantizar desde las empresas que se respeten los horarios fuera de la jornada laboral como los fines de semana, para promover el descanso y el bienestar.
Eventos de fin de año: organizar encuentros o fiestas de fin de año les permite a los trabajadores liberarse del estrés acumulado, especialmente, de los últimos meses, así como la posibilidad de sentirse más motivados y recompensados por los logros alcanzados.
Programas de bienestar para fin de año: reforzar e implementar actividades adaptadas a la época de mayor exigencia en el trabajo, puede contribuir a que los trabajadores optimicen su manera de gestionar el estrés. Talleres de manejo del estrés, programas de bienestar mental y los encuentros recreativos, son algunas de las opciones que les permitirá a los trabajadores disminuir la ansiedad, la tensión y el agotamiento, propiciando al tiempo una jornada de trabajo más saludable y productiva.
Cuidar la salud física y mental: es importante adoptar hábitos saludables como el ejercicio, una sana alimentación y la higiene del sueño que permitan el afrontamiento del día a día de con mayor energía y la gestión adecuada del estrés laboral.
Gestionar el estrés en época de fin de año, a través de medidas preventivas, no solo permite cuidar la salud mental de los trabajadores, también les ofrece la posibilidad de asumir sus responsabilidades con mayor ánimo y desempeño. Pero también fomenta un ambiente de trabajo más sano y colaborativo, impactando de manera positiva en el funcionamiento de las empresas y en las relaciones entre directivos, jefes y trabajadores.