Comenzar una práctica profesional es una experiencia importante que da apertura al fortalecimiento técnico y laboral de los practicantes universitarios, convirtiéndose en un espacio para adquirir conocimiento, crear conexiones profesionales y para adaptarse a las dinámicas propias del ambiente de trabajo, entre otras cosas. Por ser un grupo que está iniciando ese primer encuentro con el mundo del trabajo, es normal que haya un desconocimiento hacia los procesos de la empresa y de los reglamentos internos en los que reposan procedimientos como aquellos relacionados con la seguridad y salud en el trabajo. Por lo que pueden encontrarse en una situación de mayor vulnerabilidad frente a los riesgos laborales.
Generalmente, se tiene la concepción de que el Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo solo aplica para los trabajadores contratados por la empresa. Pero no hay idea más errónea que esta. Pues también los practicantes en su rol de aprendices profesionales, hacen parte del ambiente laboral. Entorno mediado por factores de riesgos psicosociales que, a diario, confluyen en el desarrollo de sus funciones. Por lo tanto, capacitar y orientar a los practicantes en temas de seguridad y salud laboral, más que una obligación de las empresas, es también un sentido de responsabilidad con la integridad física y mental de este grupo.
De acuerdo con la normatividad colombiana, como el Decreto 1072 de 2015 y la Resolución 0312 de 2019, todas las empresas están en la obligación de implementar el SG-SST para proteger a los colaboradores, incluyendo a los profesionales en formación y personas adscritas. Por consiguiente, los estudiantes que están en sus procesos de prácticas profesionales también deben recibir las inducciones y las capacitaciones para garantizar su seguridad durante el periodo de aprendizaje.
Un trabajador, aprendiz o practicante que no está debidamente informado ni capacitado en temas de seguridad y salud en el trabajo, es un individuo con alto riesgo de sufrir accidentes o adquirir enfermedades de tipo laboral. El desconocimiento no solo lo expone al peligro, también dificulta su desempeño, lo desmotiva y lo lleva a asumir una idea negativa sobre el ambiente laboral. Factores que, finalmente, impactan en la productividad de la empresa y en su reputación.
Toda organización que decide recibir practicantes en su entorno laboral está en la obligación de brindar un proceso de inducción no solo en lo que respecta de las funciones y las características de la práctica profesional sino también en temas de seguridad y salud laboral, proveerles los elementos de protección personal (EPP), supervisar su bienestar físico y mental, vincularlos a los planes de emergencia, establecer una comunicación clara y de confianza que les permita expresar sus inquietudes frente a actos que puedan poner en riesgo su vida, etc.
Por su parte, es responsabilidad de los practicantes cumplir las normas establecidas por la empresa y aquellas relacionadas con el SG-SST, reportar accidentes o actos inseguros, participar en las jornadas de capacitación en seguridad y salud laboral, usar los EPP, entre otras.
Cualquier persona que ingrese a un centro de trabajo, incluidos los practicantes, puede estar expuesta a los riesgos laborales y todo factor de riesgo que comprometa su vida y su integridad física y mental. Por eso, la prevención y la formación deben empezar desde la inducción, desde el momento en que el trabajador se vincula con la organización.
Algunas recomendaciones prácticas que los empleadores pueden tener en cuenta cuando se trata de proteger y cuidar a los practicantes, se resumen en las siguientes:
•Inducción obligatoria en SST: en su primer día laboral
•Evaluación de sus funciones y tareas: definir si su rol requiere asignación de EPP
•Formación continua y supervisión: asignar un coordinador que evalúe semanalmente su articulación con el SG-SST y resuelva dudas sobre tareas que puedan poner en riego su seguridad
•Permitirles la participación activa en capacitaciones y jornadas en SST
•Establecer canales de comunicación claros y eficientes
•Ofrecer canales de apoyo relacionados con la salud mental: seguimiento a situaciones como sobrecarga laboral, estrés, desempeño laboral, etc.

